jueves, 17 de marzo de 2011

LA ENERGÍA DEL DINERO Y LA CONCIENCIA DE PROSPERIDAD

Todo lo que hay en el universo es energía, así que el dinero también es energía y por supuesto, tiene su propia vibración. Esto quiere decir que sólo podemos alcanzarlo cuando vibramos en la misma frecuencia y estamos en línea con nuestra petición. Por otro lado, si nos desesperamos y pedimos dinero desde la necesidad y la carencia ¿Adivina qué?  Se aleja de nosotros porque posee una energía demasiado sensible.  Por esta razón vemos personas que no necesitan dinero y a quienes denominamos ricas, ganándose los carros, los viajes y el dinero en efectivo que los demás anhelamos. Precisamente porque no tienen la necesidad.  También es importante erradicar las creencias negativas conscientes e inconscientes que tenemos hacia el dinero, ya que sólo recibimos la cantidad de dinero que creemos que merecemos: "Si la cifra no cabe en tu mente, no ingresará a tu bolsillo". 

Para reprogramar la mente debemos utilizar afirmaciones positivas y eliminar los pensamientos de escasez y las palabras que los acompañan. Aunque es algo que toma tiempo, podemos empezar por tomar conciencia y hacer que nuestra mente se vuelva un testigo, un observador, de tal forma que cada vez que nos sorprendamos pensando en escasez repitamos decretos de prosperidad para desviar la atención de la carencia a la abundancia.

Quiero compartir con ustedes esta historia que encontré en internet y que en mi opinión, ilustra muy bien el desequilibrio existente entre el pensamiento, la petición y el deseo ardiente con respecto al dinero:

"Un hombre andrajoso, que parecía no poseer bienes materiales, se acercó a un capataz y le dijo:

¿Puede ayudarme? Necesito trabajo.
Muy bien -dijo el capataz – tome esa piedra grande y hágala rodar cuesta arriba y cuesta abajo. Si lo que necesita es trabajo, eso bastará para sus necesidades.
No me entiende -dijo el hombre- lo que necesito en realidad es dinero.
Ah -contestó el capataz – si se trata de dinero, aquí tiene cincuenta dólares. Pero no puede gastarlos.
El hombre se quedo de nuevo perplejo.
No me entiende, lo que necesito en realidad es comida y ropa – no sólo dinero.
Si está seguro de que eso es todo lo que necesita -contestó de nuevo el capataz- puede gastar el dinero en comida y ropa, pero no podrá comer la comida ni usar la ropa.
El hombre se vio obligado a ver que lo que realmente necesitaba era una sensación de seguridad, paz y satisfacción interior. Todo ello es invisible y todo esta dentro de su pensamiento; allí esta todo el sustento divino".

Nos han hecho creer que las cosas materiales constituyen la realidad y son las que nos proporcionan lo que necesitamos cuando, de hecho, son simplemente más materia, hecha de más espacio invisible. Lo que necesitas lo tienes ya, y cuando sabes esto y entras en tu interior y lo creas en tu mente, el sustento divino que buscas en forma de cosas materiales o de dinero se manifestará en cualquier cantidad que necesites. 

Debes crear en ti este nuevo sentimiento interior y confiar en la magia del creer. Tus creencias son tuyas, tienen su origen en ti y son lo que utilizas (y lo único que puedes utilizar) para crear las circunstancias de tu realidad física.

CONFIA en el poder de tu mente, en esa guía divina que esta fácilmente a tu disposición, y habrás alcanzado el primer paso hacia la manifestación del milagro de la prosperidad en tu vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario